Villa Andina es una agroprocesadora de productos orgánicos suministrados por comunidades indígenas, que opera en Los Andes peruanos y que cuenta con una certificación de comercio justo. Luego de 3 años de operaciones con un crecimiento estable, la empresa se encontraba en la búsqueda de fuentes de capital externo para financiar la expansión de su planta e incrementar sus ventas. Villa Andina contrató a I-DEV para identificar y evaluar las potenciales fuentes de capital de trabajo y deuda a largo plazo. Como resultado del cierre exitoso de una ronda de $1M, Villa Andina logró construir una nueva planta certificada ISO 22000 y HACCP, y triplicar su capacidad de producción para llegar a ser el mayor exportador de aguaymanto orgánico en el mundo. Así, Villa Andina también ayudó a incrementar el ingreso anual de sus trabajadores en más del 50%, impactando positivamente una de las regiones más pobres del Perú.